El enamorado romántico en Carlos Augusto salaverry
Por: Victor Huamalies Chirito
Introducción:
El enamorado romántico en el poema “Arrullo” del poemario Cartas a un ángel de Carlos Augusto salaverry, es una categoría que nos permite encontrar en dicho poema una idea diferente del amor, expresada en el ideal del sufrimiento. La hipótesis planteada por Carlos García Bedoya de considerar el romanticismo peruano de inauténtico y domesticado (1990:86), nos parece conveniente plantearse tres preguntas: ¿Es factible dicha hipótesis en la poesía romántica de Carlos Augusto Salaverry? ¿Es inauténtico el poema “Arrullo”? ¿El amor trágico representado en el poema “Arrullo” es domesticado? La novedad está en la esperanza trágica para demostrar lo contrario. Comentan el texto: Luis Alberto Sánchez, Augusto Tamayo Vargas, Ricardo González Vigil y Alberto Escobar quienes consideran el amor como una esperanza trágica.
En el poema “Arrullo” que será analizado con la categoría del enamorado romántico lo cual permitirá una perspectiva de crítica literaria diferente sobre el poema estudiado sustentada en que el enamorado romántico es trágico porque la esperanza de amor en la amada representa un ideal del sufrimiento, asimismo se demuestra con la palabra esperanza que es recurrente en la mayoría de estrofas del poema que muestran al enamorado romántico en un sufrimiento terrible, cuando la amada le roba la ilusión del corazón con los ojos. Sin embargo, el enamorado romántico es una categoría trabajada por Rafael Argullol en el texto El héroe y el único donde el espíritu trágico del romanticismo se manifiesta en la creación del poeta peruano. Las ideas principales nos remiten a cinco palabras claves encontradas en el poema en mención: La esperanza, el alma, la ilusión, ideal del sufrimiento y el color azul.
La obra poética de Carlos Augusto salaverry nos permite vislumbrar el tema del enamorado romántico como una tragedia amorosa en la crítica literaria peruana. Posteriormente podemos indicar que el poema tiene once estrofas con setenta y siete versos. Se logra una estética de elementos que conjugan la naturaleza con el hombre, relacionadas con la flor, el sol, el edén (el paraíso) y los astros del universo, que me sugieren un primer argumento referente a la ilusión: La ilusión por una mujer es una manera trágica de no poder alcanzarla materialmente, solo se logra a través del canto al dolor en el sueño del poema “Arrullo” en el ideal de la amada. En la siguiente cita se refuerza el argumento: “El recuerdo (del ayer, del paraíso perdido) y la esperanza (proyectada a la eternidad, al paraíso recobrado)” (González 1991: 19).
Es conveniente recordar que la propuesta de Carlos García Bedoya se inscribe en un pensamiento conservador, más bien debemos considerar el romanticismo peruano como un problema muy complejo, el cual necesita de una reflexión más adecuada. Luego, la idea es mirar con otro aparato crítico metodológico la poesía romántica en el Perú, sobretodo la de Carlos Augusto Salaverry. Asimismo, se puede plantear el siguiente argumento: La esperanza es el sufrimiento del hombre por el amor. La nieve palpitante del pecho de la amada nos lleva a la tristeza en el amor. En el sonido de sus pasos escuchamos la melancolía de su voz que nos roba el alma entonces se convierte en un amor trágico el poema. Por tanto la esperanza de amor es una ilusión. La siguiente cita respalda el argumento dos: “Cartas a un ángel es, al mismo tiempo, canto al dolor, a la ausencia…” (Escobar 1958: 45). El principio en que se apoya la categoría del enamorado romántico tiene como finalidad demostrar la tragedia en la esperanza de amor en la amada que representa un ideal del sufrimiento expresado en los versos más esperanzadores de la creación poética del Perú.
La ilusión es trágica en el poema
La ilusión por una mujer es una manera trágica de no poder alcanzarla materialmente, sólo se logra a través del canto al dolor en el sueño del poema “Arrullo” en el ideal de la amada. En primer lugar la ilusión por una mujer es una manera del dolor del poeta para expresar a través de palabras un sentimiento no correspondido en el alma virginal del canto, amparado en el sueño que nos lleva a los grados infinitos de la belleza del sufrimiento pero como puede haber belleza en la escritura del sufrimiento del yo poético, en los siguientes versos comprobamos tal aseveración y cito textualmente: “Tu alma virginal,/ Como a través de un tul”¹ (Escobar 1958: 124). Amar a una mujer prolonga una soledad amarga en los versos a través del silencio del corazón.
La abstracción del amor llevado de la razón a la libertad de amar lo comprobamos en la siguiente cita: “El recuerdo (del ayer, del paraíso perdido) y la esperanza (proyectada a la eternidad, al paraíso recobrado)” (González 1991: 19). El recuerdo permite al escritor del poema buscar el ayer, cuando conoció en el pasado a la amada, en el paraíso que nos promete Dios si amamos a una mujer que nos permite estar conmovidos en el camino de la esperanza que nos lleva a la eternidad por un amor imposible. La palabra se proyecta en recobrar cada momento de lucha por los valores de ser puros en el amor como lanzarnos al vacío por una mujer que se encuentra a nuestro lado y no puede el poeta lograr lo concreto sino lo plasma en la ficción.
La esperanza es el sufrimiento
Cada poeta lucha como un valiente y no se rinde en el caso del amor, en un segundo argumento notamos que la esperanza es el sufrimiento del hombre por el amor. La nieve palpitante del pecho de la amada nos lleva a la tristeza en el amor. En el sonido de sus pasos escuchamos la melancolía de su voz que nos roba el alma entonces se convierte en un amor trágico el poema. Por tanto la esperanza de amor es una ilusión. La pasión lo lleva a sufrir, es decir que en el sonido de sus pasos, el poeta reafirma su voluntad de luchar contra la adversidad en una conciencia romántica de la tristeza y cada pena es un lamento que nos permite comprobar la calidad del poema demostrando que es auténtico y supera a Goethe en: Las desventuras del joven Werther donde trabaja la palabra amor en los siguientes versos: “Mi pobre corazón, que sufre más que el que languidece en el lecho del dolor” y lo comparamos con los versos del poeta peruano del amor sufrido, cito textualmente: “Con eco arrobador, responden en mi afán, que, un cielo es la esperanza de tu amor” (Escobar 1958: 124).
El marfil que no deja entrar el amor, es tan duro el corazón de la amada que no lleva paz
¹ El alma virginal, me refiero a la lucha interior por demostrar que hay un cristal de esperanza en que el arrullo es dulce para atraer el amor de la amada pero resulta trágico porque sólo es una ilusión.
sino tragedia, es como la muerte en vida donde la esperanza produce placer y dolor a la vez en la siguiente cita comprobamos que el amor es una tragedia: “Cartas a un ángel es, al mismo tiempo, canto al dolor, a la ausencia…” (Escobar 1948: 45). El canto que provoca una plenitud y una imaginación romántica en las rosas que son de color rojo que los labios robaron hacia un lamento en abril con el eco del genio para crear una respuesta a la negativa de la amada con la facultad de recurrir a imágenes de color azul en el cielo donde hay una paz interior donde se pueda consumar el amor. Es un profeta, al cual la respuesta debe ser positiva para simbolizar el ideal trágico.
La vida es un tiempo trágico para el amor
“La imaginación es la capacidad vital” (D’Angelo 1999: 155). Para el poeta la imaginación es el primer agente de toda percepción humana en el cual sentimos si una mujer nos ama, en el poema notamos que para el enamorado romántico: La vida es una flor cuando se nace purísimo, resulta placentero vivir por una mujer. Al pasar el tiempo la niña se convierte en una bella mujer. Si la mujer es tocada en su mano juvenil, su mano es una espina que se convierte en acciones como la indiferencia al no corresponder el amor del hombre romántico. En consecuencia la vida es un tiempo trágico para el amor. Para el poeta el tiempo es trágico porque la construcción metafórica de la mujer ideal se convierte en tragedia sensible de la existencia terrenal. Por tanto responderíamos la hipótesis de Carlos García Bedoya en una primera respuesta de que la poesía romántica de Carlos Augusto Salaverry es auténtica y reformulada, no tiene nada de doméstico, también podríamos aplicarlo a otros poetas del romanticismo en el Perú.
En tres versos de la tercera estrofa del poema notamos la sensibilidad del alma, se plantea de la siguiente manera: “Su aroma es el amor, su cáliz el placer, Es rosa que al tocar…” (Escobar 1958: 124). Lo confirmamos con la siguiente cita:
Su desolación frente a un mundo que sólo puede superar con su poesía a piel de carne, con su sufrimiento convertido en expresiva nota lírica acerca a Vallejo hacia Salaverry. Salaverry se encuentra, con los más auténticos exponentes de la lírica, en esa desolación infortunada, en esa niñez que supervive y que encuentra el camino de la expresión artística frente a la brutalidad espantosa de la realidad que lo sobrecoge en su sensibilidad excesivamente tierna. Unamuno dijo…: un poeta ¿Qué es, sino un hombre que ve el mundo con corazón de niño…? (Tamayo 1993: 453)
La sensibilidad es trágica porque hay una desolación frente al mundo de los seres vivos por el cual es infortunado el destino y el tiempo se convierte en enemigo de los amantes platónicos.
La amada es tan bella que produce una condena terrible
Lo bello de contemplar a la amada es hermoso. La amada compite con la belleza del sol. La inmensidad de la esperanza comparada con el mar azul no llega al carmín de la amada en su corazón. El enamorado romántico sufre porque al descender la amada como un ángel lo baña en una tibia luz del amanecer. La amada es tan bella que produce una condena terrible. Por consiguiente es un sueño alcanzarla. La condena terrible del amor por la belleza de una mujer nos permite entender que el símbolo del sol alumbra y renace como la iluminación de belleza en la diosa Afrodita y la inteligencia de Atenea que pide en el alma de los mortales seguir en el sufrimiento. El sentido de una incapacidad para amar materialmente provoca una locura para crear símbolos del amor como el rayo que infunde carga eléctrica a la pasión por el nacimiento de una nueva esperanza trágica.
Dos citas confirman el argumento: “Esa vida de altibajos: de privanza oficial y abandono absoluto; de prematura tristeza y tardío amor; de viajes fáciles y regresos difíciles, obligó al poeta a luchar por la subsistencia en forma heroica” (Sánchez 1981: 966). La heroica lucha del poeta de plasmar en cada palabra su vida, pero la ficción se convierte en una forma de vida de privaciones para que la amada no abandone el herido corazón. En la segunda cita los versos: “Hermoso es contemplar, el sol en el confín” se complementan con el nacimiento de la tragedia amorosa: “Predomina en Salaverry el tono elegíaco. Nadie podría negar la delicadeza, la suave melancolía que imprime indudable aristocracia a sus más vulgares lamentos” (Sánchez 1981: 967). La segunda respuesta para García Bedoya es que la ideología del amor trágico para Salaverry es entender la relación de la luz de la esperanza en una realidad creada por el poeta, donde el amor no caiga ante los enemigos de lo bello hacia la idea del sufrimiento. Un poeta siempre tiene un plan y que es propio del concepto para amar a una mujer que se transforma en un ángel idealizado².
² En términos de lo idealizado el Yo-poético se pierde porque no hay posesión física de la amada por lo que el dolor tiende hacia la abstracción.
Al brillar el sol del amanecer en la diosa Aurora
Los ojos del sufrimiento por la amada se reflejan en la tela de la esperanza. El sufrimiento es como el deseo por el oro en su amplitud visual de la tragedia. El color amarillo del sol grana los espacios de los que esperan el amor correspondido. Al brillar el sol del amanecer se refleja la imagen de la diosa Aurora de los romanos que sufren cuando se observa a una mujer tan bella en su figura. La estrella que al brillar también atrae la ilusión del sufrimiento por la amada. De manera que la voz de la esperanza seguirá suspirando a través de los ojos del enamorado romántico. Si para los románticos europeos el color azul es de vital importancia para el poeta peruano el color amarillo es sinónimo de vida y de grandeza.
La diosa Aurora es de tal belleza en su amanecer que se convierte en una figura femenina que juega un papel importante en la construcción de los versos del poema porque todo es un renacer a pesar del rechazo de la amada, lo relacionó con las siguientes citas: “El siente, y siente intensamente, todos los matices de aquel afecto, desde la dulce y suave fruicción del amor romántico y platónico hasta la ardiente y apasionada emoción del deseo…” (Ureta 1918: 168).
Lo que se puede relacionar son los sentimientos creados: “Salaverry sabe amar en su poesía con amor humano y verdadero, donde se agitan los sentimientos generosos que enaltecen y elevan, y las pasiones que deprimen y abaten” (Ureta 1918: 168). Concuerda Ureta con Argullol que la pasión deprime al poeta y abate de manera terrible al enamorado romántico.
El Edén donde el paraíso es una felicidad efímera
Continuar con el análisis del poema, con la transcripción de ocho estrofas del poema “Arrullo” y son los siguientes versos:
I
Tu alma virginal,
Como al través de un tul
Sonríe en el cristal
De su pupila azul;
Y arrobas mi ilusión
Si bañan su matiz
Tus ojos, con la luz del corazón.
II
La nieve palpitante de tu pecho
De marfil,
Las rosas que tus labios le robaron
Al Abril,
Con eco arrobador
Responden a mi afán,
Que, un cielo es la esperanza de tu amor.
III
La vida es una flor
Purísima al nacer…
Su aroma es el amor,
Su cáliz el placer.
Es rosa que al tocar
La mano juvenil,
Enseñan sus espinas a llorar.
IV
Más diera de ese cielo que matiza
El arrebol,
El rayo de esperanza que me alumbra
Como el sol,
Y el sueño del Edén
Que el alma vé lucir,
Por una de tus lágrimas, mi bien!
V
Hermoso es contemplar
El sol en el confín,
Vertiendo sobre el mar
Sus olas de Carmín;
Y es bello, al descender,
Bañado en tibia luz
Un rayo del crepúsculo al nacer
VI
Encanto de mis ojos es del alba
el tornasol,
Que esmalta de oro y grana los espacios
Como el sol…
Mas nunca, al despertar,
La aurora tiene luz
Tan bella cual la luz de tu mirar.
VII
La estrella que al lucir
Fascina mi ilusión,
Jamás hizo latir
Cual tú mi corazón
Tú escuchas, al posar
Tú planta junto a mí,
La voz de mi esperanza suspirar.
VIII
Paloma del Edén!
Tus blancas alas, son
El suspirado bien
Que sueña el corazón.
Frescura y sombra aquí
De flores te daré,
Y un mundo de ternura para ti… (Carlos Augusto Salaverry)
Algunos poetas prefieren la muerte que ver al ser amado en manos de otro, en vista de que los ojos de la amada son como estrellas que permiten iluminar la esperanza trágica. A través de los ojos azules que es el color de los románticos puso el cielo la sonrisa del Edén. El principio del amor empieza con buscar el Edén donde el paraíso es una felicidad efímera porque es un sufrimiento amar, un ser que no te corresponde. La mirada y la suplica a Dios son una esperanza fatal. Por tanto el nido del amor para los dos es un ideal en la sombra del silencio. En los caracteres conflictivos (Hegel 1842: 237) de una felicidad efímera donde el poeta busca una solución al conflicto y al desacuerdo de no conseguir a la amada en una poesía dramática que se desarrolla en el Perú con temas románticos del orgullo del alma (Hegel 1842: 233) y un amor pleno en la esperanza profunda del dolor.
En los sucesos de los amores no correspondidos como el sufrimiento como consagración (Muschg 2007: 487) en que la moral va de la mano con la estética para comprometerse en la estrechez de la realidad en donde se apela a Dios en que la amada sea de uno, en este caso de un amor heterosexual en una sonrisa ante la tragedia, se nota que el poeta construye un mundo ficcional que busca sombras en el paraíso y lo corona con el nido del amor para los dos. La siguiente cita confirma mi punto de vista: “El sentido romántico de estrechez de la realidad y de esperanza de superarla mediante el arte, tratando de conservar la ingenua actitud natural por encima de la tristeza de los años, del desengaño, ese refugiarse en sus propias imágenes…” (Tamayo 1955: 246-247). Dado que la calidad del poeta se destaca porque logra alcanzar el encanto de iluminar su alma atormentada en los versos del poema.
Conclusión:
A lo largo de los seis subtítulos del enamorado romántico en Carlos Augusto Salaverry se ha revisado que la esperanza de amor en la amada representa un ideal del sufrimiento en que el tiempo es trágico y una condena terrible. Se ha demostrado que la poesía romántica representada en el poema “Arrullo” no tiene nada que envidiarle a los poemas románticos europeos y hay que superar la idea de que los poemas peruanos son becquerianos, la originalidad reside en lograr que las palabras transformen los versos en ficciones hacia el sentimiento trágico en el pensamiento del lector, un punto de vista divergente con la crítica literaria peruana es que el tiempo es el mejor aliado para un crítico literario para entender la poesía del siglo XIX referente al romanticismo, las estrofas del poema permiten diversas ideas como el principio del amor, la figura de la mujer, el color amarillo frente al color azul, la amplitud visual de la tragedia y la concepción religiosa que apela a Dios para alcanzar una felicidad ficticia. Ha sido importante tomar en cuenta los estudios anteriores para probar que el sufrimiento configura al poeta.
Bibliografía:
ARGULLOL, Rafael
1999 El héroe y el único (El espíritu trágico del romanticismo). Madrid: Taurus.
D’ANGELO, Paolo
1999 La estética del romanticismo. Traducción de Juan Díaz de Atauri. Madrid: La balsa de la medusa.
ESCOBAR, Alberto
1958 Salaverry poesía. Lima: Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Patronato del libro universitario.
HEGEL, Georg
1842 Estética (La poesía). Traducción de Alfredo Llanos. Volumen 8. Buenos Aires: Ediciones siglo veinte.
GARCÍA, Carlos
1990 Para una periodización de la literatura peruana. Lima: Latinoamericana Editores.
GONZÁLEZ, Ricardo
1991 “Centenario de Salaverry”. El comercio. Suplemento el dominical. Año 38, número 16, p. 19.
MUSCHG, Walter
2007 Historia trágica de la literatura. México. Fondo de cultura económica.
SÁNCHEZ, Luis
1981 La literatura peruana. Quinta edición. Tomo III. Lima. Editorial Juan Mejía Baca.
SALAVERRY, Carlos
1871 Albores y destellos: Diamantes y perlas y Cartas a un ángel. Biblioteca Americana Havre.
TAMAYO, Augusto
1955 “El romanticismo peruano y Carlos Augusto Salaverry”. V.20. Nro.40, Albuquerque setiembre, pp. 246-247.
1993 Literatura peruana. Segunda edición. 3 volúmenes. Lima: Peisa.
URETA, Alberto
1918 “Carlos Augusto Salaverry”. Tesis para doctor, p.168.Lima: UNMSM.
martes, 11 de agosto de 2009
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